26 enero 2007

ELLO


Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida. Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto. O cerrando puertas. O cerrando capítulos. Como quieras llamarlo. Lo importante es poder cerrarlos. Lo importante es poder dejar ir momentos de la vida que se van clausurando.



Puedes pasarse mucho tiempo de su presente ‘revolcándote’ en los porqués, en devolver el casette y tratar de entender por qué sucedió tal o cuál hecho.



El desgaste va a ser infinito porque en la vida, tú, yo, tú amigo, tus hijos, todos y todas estamos abocados a ir cerrando capítulos. A pasar la hoja. Al terminar con etapas o con momentos de la vida y seguir para adelante. No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué. Lo que sucedió, sucedió. Y hay que soltar, hay que desprenderse. No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros. No.



¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!




Cerrando Círculos
Paulo Cohello

1 comentario:

Seoman dijo...

La vida se mueve, mucho mucho. Es muy snif este post. SENTIMIENTOS, SENTIMIENTOS