Se va otra vez el niño, lleva un mes aquí y lo he visto una noche, me ha regalado una cena y su inmejorable compañía, me ha regalado la complicidad que implica no tener que dar explicaciones, de hablar sin necesidad de palabras, esas que tanto me cuesta encontrar y que él, a pesar de todo entiende tan bien, me ha regalado la primera regañina aún sabiendo que sobraba, me ha regalado otra noche de observación, de complicidad, de risas, de tristeza, de madurez.... Ha sido otra noche con Jota!
1 comentario:
Y yo que en la distancia no me acordé, imperdonable... aunque mejor tarde que nunca, felicidades...
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